EL ARTE DE PARQUEAR UN BARCO EN BARRANQUILLA

Post date: Jan 4, 2016 3:28:23 PM

Autor: ANDRÉS ARTUZ FERNÁNDEZ (Corresponsal de el Tiempo Barranquilla)

Fuente: http://www.eltiempo.com/archivo/documento/MAM-4158984

Luego de analizar los planos batimétricos que establecen el comportamiento del día en los 22 kilómetros del canal navegable desde bocas de Ceniza hasta Sociedad Portuaria de Barranquilla, Alejandro Henao está listo para ir en busca de La Alexandra, un buque liberiano que llega cargado de contenedores a la capital del Atlàntico.

Henao, de marcado acento paisa, pero barranquillero de corazón, es uno de los 11 pilotos prácticos de la empresa Pilotos del Puerto de Barranquilla.

Su trabajo consiste en ofrecer sus conocimientos y experiencias a los capitanes al mando de grandes barcos, para que puedan ingresar y salir con facilidad a través de este puerto, que mensualmente recibe un promedio de 120 embarcaciones del mundo.

Por estar ubicado donde convergen el mar Caribe y el río Magdalena, el canal de acceso y salida al puerto de Barranquilla es uno de los 10 más complicados del planeta.

“Pero es seguro, porque cuenta con el personal idóneo y los avances tecnológicos que permiten mitigar los riesgos”, dice sin titubeos.

EL TIEMPO acompañó al práctico en su trabajo desde el embarcadero, ubicado en el barrio Las Flores, y a bordo de ‘La Isla Pensilvania’, uno de los 3 botes dispuestos para dicha labor. Al mando iban Néstor Martínez, capitán, y Francisco Petro, patrón de lancha. El recorrido tardó unos 30 minutos.

En el horizonte se alcanzaba a ver el casco de ‘La Alexandra’, cuya tripulación había enviado un mensaje para advertir sobre su llegada, y para dar los puntos sobre las coordenadas en las que se alinearían con ‘La isla Pensilvania’.

“Esta es una actividad silenciosa, que ocurre las 24 horas del día. Somos los asesores de los capitanes que vienen y salen hacia otras partes del mundo. Emitimos conceptos y damos consejos para las maniobras en el recorrido hasta que atraquen o zarpen del puerto, pero el control de la nave no depende de nosotros”, explica Henao.

Eran casi las 6 de la tarde. Antes de que el capitán Henao se embarcara, recogió al capitán Gonzalo Hernández, piloto práctico que viene a bordo del ‘Ocean ID’, de bandera china, que ya se despedía de aguas colombianas.

De noche sólo se ve la luz que ilumina la escalera de cuerdas por la que debe bajar Hernández. En una lucha con la fuerza del río, Néstor consigue pegar el bote lo que más puede al buque, pero falla en el intento. En menos de un minuto, otra maniobra y esta vez logra su cometido.

Sin embargo, todavía falta que el capitán Henao suba a ‘La Alexandra’. El riesgo es inminente, porque la escalera por la que debe ingresar no es tan alta. Un mal movimiento y podría ser aplastado.

Ese es uno de los tantos peligros que corren los pilotos. Sin embargo, explica Henao, nunca se han presentado accidentes que lamentar.

Ya en ‘La Alexandra’, el práctico se pone de acuerdo con el capitán al mando. Luego de dos horas de recorrido, embarcación, carga y tripulación, incluidos los periodistas, están de nuevo en tierra.

Henao finaliza explicando que un práctico no realiza más de tres faenas diarias, para evitar desconcentración, y que su entrenamiento sólo puede iniciarse si demuestra una experiencia de marino, superior a los 10 años.

La paga depende de la maniobra y de las toneladas que pese la embarcación.